Un amigo insiste en que la característica que reúne a todos los chilenos es su radical falta de humor. Para él, el humor
debe ser políticamente incorrecto para provocar algún resultado, y la política es en este país algo estructurado y correcto. Aunque puede sonar exagerado, sí es cierto que hay cuestiones sobre las que pocos chilenos se relajan, aún cuando haya pasado mucho tiempo y la historia admita nuevas interpretaciones.
Camino por la avenida Andrés Bello. Además de tener 15 hijos, este venezolano fecundó Chile con la creación de la Universidad y la redacción del Código Civil. Bello fue maestro de la masonería y también dio clases de historia a un adolescente Simón Bolivar. Un tipo importante, y es importante la avenida, que costea el río Mapocho y da lugar a muchísimos árboles.
En el cruce con la calle Los Leones, dos estatuas de bronce muestran a esos felinos africanos en una actitud que no termina de ser agresiva. En 2003, un periodista peruano se hizo grabar con una cámara de TV frente a los leones en cuestión, y concurrió a un programa chileno. Reclamó que las estatuas habían sido robadas de la ciudad de Lima, al final de la Guerra del Pacífico, allá por el año 1884.
“Son figuras donadas por don Arturo Lyon a la ciudad, correspondiendo a copias en bronce de los que originalmente adornaban la entrada de su casa, en alusión al emblema familiar y heráldico de su apellido”, fue
la respuesta de un ofendido historiador militar.
Más allá de los análisis sobre motivaciones imperialistas o meramente comerciales, la Guerra del Pacífico es todavía un tema de actualidad, pero jamás podría ser material para el humor.
Una pregunta que me acompaña en mis primeras semanas en este país: ¿realmente existe el mítico pueblo de
Pelotilehue? Una peregrinación hacia ese enigmático espacio bien podría ser un comienzo para comprender el humor de los chilenos. Más pícaro y menos moralista que Patoruzito, el pequeño cóndor logró, aseguran aquí, más de 80 millones de lectores. ¿Cómo pudo suceder eso? Es un misterio tan grande como la ubicación geográfica de Pelotilehue.